"I went to MoMA and...", comenzó como un experimento improvisado para ver lo que pasaría si se le daba a los visitantes del museo la oportunidad de compartir sus experiencias en el Museo, cualquiera que sea. Simplemente proporcionaron lápices y tarjetas y se ofreció a mostrar todas las respuestas en el vestíbulo, y superó todas las expectativas, dando una increíble variedad inteligente, hermosa, sincera, escrito y dibujado a mano. Así que increíble, de hecho, que pronto cubrió el vestíbulo, lleno de una web, y se convirtió en una campaña publicitaria muy popular en el New York Times, revistas y carteles por toda la ciudad. La gente incluso ha comenzado a compartir en línea, con las tarjetas a aparecer en la web, y blogs.
Basándose en el éxito del proyecto original, han relanzado "I went to MoMA and...", con la incorporación de una nueva plataforma digital y social que le hará descubrir y compartir una parte aún mayor de la experiencia. El proyecto en sí es inherentemente social, pero han querido mejorar el proceso de presentación y el intercambio sin perder la simplicidad del lápiz y papel.
Es algo muy fresco y enriquecedor que hace al visitante pasar a formar parte activa del museo.
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